El crecimiento experimentado por móviles y tablets en los últimos años ha sido espectacular. Cada vez son más usuarios los que utilizan este tipo de dispositivos para navegar por la red, investigar sobre los productos en los que están interesados, conocer las opiniones de otros usuarios y hacer sus compras online. De hecho, el 25% del tráfico de Internet ya procede de estos dispositivos. Por eso no es extraño que Google hay anunciado que a partir del 21 de abril aquellas páginas que no cuenten con un diseño responsive perderán posicionamiento SEO.
Es cierto que el gigante de Internet ya venía advirtiendo sobre la importancia de ello para ganar visibilidad en los resultados de búsqueda, pero ahora se trata nada menos de que de ultimatum que traerá consecuencias para aquellos que no se hayan puesto las pilas en el momento en que estos cambios empiecen a funcionar. Pero además, lo más sorprendente es que por primera vez Google ha hecho público uno de los factores que influyen en su algoritmo a la hora de filtrar las páginas.
Así pues, aquellas webs el 21 de abril sigan sin implementar un diseño responsive corren el riesgo de ser enviadas al vagón de cola, lo cual puede suponer un gran prejuicio para el tráfico de visitas que puede desplomarse de forma irremediable, haciendo que la tasa de conversión sufra también un duro varapalo. Algo que solamente puede ir a peor, ya que en 4 años se prevé que el tráfico móvil represente ya un 40% del total.
Las ventajas de tener un diseño responsive para tus estrategias de marketing online
No obstante, el diseño responsive no solamente es importante de cara a conseguir un mejor posicionamiento SEO. Es evidente que el cambio pude suponer una gran ventaja para superar a nuestra competencia y escalar puestos en los resultados. Pero además, se trata de ofrecer al usuario una mejor experiencia de navegación dentro de nuestra tienda online. Este es precisamente lo que ha movido a Google a realizar cambios en su algoritmo de búsqueda.
La idea es que los usuarios puedan navegar desde sus dispositivos móviles y tablets cómodamente como si lo hicieran desde un ordenador. El diseño responsive lo que hace es redimensionar la web y organizar los distintos elementos de manera que el usuario pueda navegar sin dificultad. Y es que si los usuarios no pueden hacerlo, lo más normal es que se marchen.
Por eso, con el objetivo de garantizar la mejor experiencia y de que los consumidores pasen el mayor tiempo posible en la web resulta de vital importancia que vayas pensando en implementar un diseño responsive en tu web si no los has hecho ya.
