El ecommerce está revolucionando el modo en que los consumidores compran. La multitud de tiendas online permite a los usuarios comparar los precios de aquellos productos que desean entre distintas páginas para adquirirlo donde más le convenga, ya sea en tienda física u online.
El poder de las recomendaciones
En ese sentido, un estudio de Blue Nile Research ha averiguado cuáles son los canales de distribución que influyen en las decisiones de compra de los usuarios y el resultado revela que se trata de una combinación de varios: el 76% de los compradores de productos B2B y el 72% de los compradores B2C usan tres o más canales para informarse antes de realizar una compra. Solo es el 8% de los compradores los que usan un único canal para realizar una compra.
Si comentábamos que el precio es un elemento decisivo por el que se busca el producto en distintos canales de distribución, hay otros factores a tener en cuenta. Así, una 46% de los participantes en el estudio buscan tablas comparativas de los productos, con sus respectivas características y precio para que puedan escoger el que más se adapte a su presupuesto.
En cuanto a los compradores B2C, el 36% de estos valora muy positivamente los artículos en blogs ya que combina datos técnicos de los productos y la experiencia personal del blogger. Por contra, solo el 18% de los consumidores B2B valora el papel de los blogs como medios de recomendación y optan por los vídeos explicativos de los productos.
Si hay algo en lo que compradores B2B y B2C coinciden es en la búsqueda del producto en buscadores, lo hace el 82%, o bien, acceder directamente a la web de la marca, el 80%.
Las opiniones y reviews de otros usuarios son otro canal al que los consumidores recurren para informarse antes de formalizar la compra, siendo los compradores B2B los más proclives a esta práctica. Por su parte, la búsqueda en blogs y redes sociales, la realizan entre un 14% y un 25% de los participantes en el estudio.
Todo apunta a que con los primeros canales de búsqueda, el usuario pretende encontrar características y datos más concretos que le permitan tomar la decisión de comprar el producto, y en los canales secundarios, como redes sociales o blogs, buscan emociones y experiencias de terceros que les reafirme en la voluntad de adquirir ese producto.