Matt Cutts, director del departamento contra el spam de Google, anunciaba hace unos días la actualización del algoritmo de Google, lo que se conoce ya como el Penguin 2.0.
Desde que el 24 de abril de 2012 el pingüino de Google entrara en acción, hemos podido ver como caían miles de webs que abusaban de keywords, contenido duplicado o de poca calidad y enlaces de poca calidad y origen dudoso.
Tras las pequeñas actualizaciones del Pingüino el 24 de Mayo y el 5 de Octubre del pasado año, ahora se anuncia una nueva generación del Pingüino que seguro que no pasará desapercibida.
Hasta ahora no sabemos mucho sobre cuáles serán las pautas que marcará este Pingüino 2.0, pero si interpretamos las palabras de Matt Cutts podemos sacar algunas líneas generales de lo que vendrá.
- SPAM. Todas las medidas que toma Google a través de los algoritmos van destinadas a penalizar y acabar con el SPAM en internet. Por esa razón, Penguin 2.0 afectará únicamente a las webs que se pueden considerar SPAM.
- Contenido. El contenido continuará siendo el Rey. Contenido de calidad son aquellos que los usuarios visitan, vuelven a visitar y, además, recomiendan. Lo que parece que se medirá con la recurrencia de las visitas a la web.
- Enlaces. Los enlaces pagados son perseguidos. Lo que significa que lo serán las webs que los compran y que los venden. Además, debemos intentar que los enlaces que recibimos no estén vinculados a páginas con prácticas dudosas de linkbuilding.
- Redes Sociales. Cada vez son más importantes las Redes Sociales para mejorar el ranking de nuestra web. Esto está relacionado con la calidad de los contenidos y de lo mucho que estos se compartan en la red, sobre todo en Google +.
- Autoridad. La autoridad adquiere aún más relevancia. Se darán mucha más relevancia en los resultados a las autoridades de cada nicho, ya sean empresas o usuarios.
Si lo analizamos bien, en principio no parece que los cambios que se avecinan introduzcan grandes novedades. Más bien parece que perfeccionará las medidas que se han tomado hasta ahora. Pero, ya sabemos que a Google le gusta guardarse siempre un As bajo la manga.
